Me ha parecido válido abordar una experiencia bibliotecaria, que fue incluida en el reciente XXXIV Coloquio Internacional de Bibliotecarios, realizado en México. Allí, en la presentación titulada “Tan lejos, tan cerca. Imprescindibles bibliotecas en tiempos de distanciamiento”, el profesor chileno Gonzalo Oyarzún, compartió una vivencia desarrollada en Costa de Marfil, cuyo alcance y sentido contribuye de forma genuina a la formación de capital cultural y social, se trata de la Biblioteca comunitaria agrícola “Grainothèque”, ubicada en este país de África occidental.
Este proyecto de granoteca o biblioteca de semillas, granos o cereales, pone a disposición de los agricultores, semillas de calidad y una cámara frigorífica solar (banco de productos agrícolas) para la conservación de cereales y de cultivos post cosecha. Ofrece también un espacio de trabajo colaborativo y un kit de información y capacitación en técnicas agrícolas. En este lugar, en el que se prestan granos como si fueran libros, Oyarzún compartió un dato muy esclarecedor, que da cuenta de la importancia de lo que genera este emprendimiento a nivel social: solo en el año 2018, se llegaron a intercambiar a través del trueque comunitario, unas tres toneladas de semillas, dato que alcanza para entender cómo una biblioteca puede ser una herramienta de lucha genuina y legítima contra las desigualdades, el éxodo rural, la migración masiva de jóvenes y un instrumento de transformación social.
El proyecto fue ideado en el año 2017 por Daniel Oulaï, joven experto en gestión de proyectos sociales, voluntario online en el sistema de Naciones Unidas, quien planteó un programa de asistencia social vinculado con un taller colaborativo de embolsado de semillas, lo que derivó en el establecimiento de huertos comunitarios en distintas comunidades marfileñas.
Un punto que otorga valor a esta cadena de
producción es el vínculo entre la producción agrícola y la producción animal,
en donde los cereales y legumbres que no se venden en el mercado son puestos en
un molino comunitario para compostaje de las tierras, mientras que el abono del
ganado se lo utiliza en los campos a través de incubadoras agrícolas para hacer
más efectivo el proceso de recolección de semillas de buena calidad. Este
método de trabajo brinda una solución para permitir a los agricultores
reaccionar rápidamente a las plagas de insectos.
El sistema de préstamo de semillas es como con los libros, se pueden retirar muestras que se devolverán según el tiempo pautado entre los usuarios, un verdadero ejemplo de biblioteca comunitaria para replicar en diferentes contextos, y acaso una posibilidad de la cual aferrarse en estos tiempos tan inciertos.
Una reflexión sobre el contexto
El ejemplo africano es uno entre tantos, la bibliotecología suele aportar ideas que se vuelven esenciales en contextos disruptivos como los que estamos atravesando en nuestra sociedad. Es innegable que algo nos cambió, ante la pandemia tuvimos que generar contenidos específicos en plataformas virtuales, lo cual significó un abanico de oportunidades y posibilidades, en donde la noción de servicio se vio condicionada por protocolos de seguridad y planes de contingencia.
Como bibliotecarios y bibliotecarias, tuvimos que pensar respuestas genuinas para los usuarios, con los recursos disponibles, y entendimos que el concepto de resiliencia tiene alcances profundamente vinculados con la empatía y el empoderamiento, que nos hace superar las desavenencias suscitadas por este escenario inimaginable a principios de 2020.
Un gran amigo, Rafael Bardas, que se fue este año, me dijo lo siguiente: “lo más probable es que cuando la crisis pase, descubramos un mundo nuevo, no sé si mejor o peor, pero distinto”
Esperemos que todo este esfuerzo nos permita articular aquello que aprendimos a cultivar en medio de una crisis, a veces, desde esa palabra, se construye lo que está destinado a permanecer, habrá que intentarlo.
Fuentes consultadas:
XXXIV Coloquio Internacional de Bibliotecarios
http://www.coloquiobibliotecarios.udg.mx/
La biblioteca, inversión pública de transformación social / Gonzalo Oyarzún
Une grainothêque en cête-D'Ivoire
https://www.bibliosansfrontieres.org/impact/une-grainotheque-en-cote-d-ivoire/
Grainotheque. Facebook
https://www.facebook.com/Grainotheque.ci/
Oulaï Daniel. Twitter
No hay comentarios:
Publicar un comentario