Una presencia que
torna visible el pensamiento de izquierda en las problemáticas frecuentes del
mundo de la información y la comunicación.
Noticia Biográfica
Zapopan Muela obtuvo el Doctorado en Estudios de la Información en la
Universidad de Sheffield, Inglaterra, Reino Unido, gracias a una beca de
excelencia académica tanto por la misma universidad como por el Consejo
Nacional de Ciencia y Tecnología de México (CONACYT), titulado en 2010. Tiene
maestría en Bibliotecología por la State University of New York, Buffalo, Nueva
York, EE.UU., gracias a una beca de excelencia académica tanto por la misma
universidad como por el programa Fulbright del Gobierno de los EE.UU., titulado
en 2002. Licenciatura en Bibliotecología por la Facultad de Filosofía y Letras,
Universidad Autónoma de Nuevo León (FFyL-UANL), San Nicolás de los Garza, Nuevo
León, México, titulado en 1998 con excelencia y las más altas distinciones.
Cuenta también con estudios incompletos en licenciaturas en Historia y
Lingüística Aplicada Inglés-Español didáctica y traducción contrastiva por la
misma FFyL-UANL, México (entre 1989 y 1992).
Desde 2008 es
Profesor Titular de Tiempo Completo y Jefe de la Biblioteca Ingeniero Cayetano
Garza Garza de la Facultad de
Organización Deportiva, UANL (Mexico). Desde 2005 es Editor voluntario para
México de E-LIS: Electronic Prints in Library and Information Science y Editor
Asociado voluntario de DOAJ (Directory of Open Access Journals).
Ha realizado
conferencias en 18 países (Alemania, Argentina, Bélgica, Canadá, Colombia,
EE.UU., España, Francia, Holanda, India, Italia, Irlanda, Luxemburgo, México,
Suiza, Reino Unido, Uruguay, Venezuela), asimismo lleva publicados más de 170
artículos de acceso libre y gratuito.
Por fuera de su
actividad académica ha publicado 2 libros de poemas. Entre sus investigaciones
figuran trabajos sobre análisis de la comunidad en bibliotecología;
metodologías cualitativas de investigación e interpretivismo; necesidades de
información; pensamiento crítico y escéptico; epistemología y teoría marxista y
crítica en bibliotecología; bibliotecología crítica y laborista; compromiso
socialmente crítico en bibliotecología; crítica a las falacias ideológicas de
las sociedades de la información y el conocimiento; economía política del
capitalismo informacional y cognitivo; crítica a la propiedad intelectual que
afecta la bibliotecología; ética bibliotecológica laborista; educación
bibliotecológica; bibliometria crítica entre otros.
Ha participado en
redes de crítica social al establishment bibliotecario mundial, movimientos de
Acceso Abierto y organizaciones vinculadas con los derechos humanos.
Entrevista
¿Recuerda cuando fue el
momento o circunstancia en que pasó por su mente la idea de empezar a estudiar
bibliotecología? ¿qué originó ese
interés, que lo impulsó?
Sí, claro.
Bueno, antes que nada
muchas gracias mi estimado Daniel Canosa por haber tenido la gentileza en invitarme
para esta entrevista virtual.
Y bien la historia
empieza más o menos así. Desde 1984 a 1987 estudié en la Preparatoria División
del Norte de Pancho Villa en la entonces aún pequeña Ciudad de Camargo, en
Chihuahua en México. Durante esos tres años era un lector muy asiduo en la
única y muy pequeña biblioteca pública, La Biblioteca Pública de Ciudad
Camargo, Chihuahua, que existía en la ciudad y que se encontraba en el Parque
de la Madre por la Av. Benito Juárez o Carretera Panamericana entre la Av. González
Ortega y calle Guillermo Prieto.
Saliendo de la
preparatoria en las tardes no sólo acudía para realizar mis tareas sino además
leía por placer sus sendos libros, que aunque pequeña la biblioteca, para mí
era un mar inagotable de libros, con libros incluso en inglés, ruso, alemán,
francés, italiano y otros idiomas. Ahí tuve mi primer acercamiento con El
Capital de Marx; El Manifiesto del Partido Comunista de Marx y Engels; La
ideología alemana de Marx y Engels, el Qué hacer de Lenin y muchos libros más
de los fundadores del comunismo o bien lo que hoy conocemos como Marxismo, y de
otros comunistas, socialistas y críticos anti-capitalistas cuyas ideas tanto
influirían en mi formación cognitiva. De Ciudad Camargo, Chihuahua es
originario –además de muchos otros artistas como el escultor Sebastián, la
cantante ranchera Lucha Villa y las actrices María Sorté y Alma Delfina– el
muralista comunista Alfaro Siqueiros contemporáneo de Diego Rivera, y él había
donado muchos libros con ideologías socialistas, comunistas, marxistas y
anti-capitalistas.
Todos los días o casi
todos, saliendo de la preparatoria, me pasaba las tardes en dicha biblioteca, o
incluso las noches, tanto así, que su bibliotecaria, la Sra. Josefina, quien
vivía a una cuadra de mi casa, dado que en las tardes y noches, yo era el único
lector, entonces me confiaba la biblioteca y las llaves para que la cerrara y
que cuando acabara de leer se las fuera a llevar a su casa de pasada. A veces
ella tenía que ir a pedírselas a mi mamá a mi casa pues me quedaba hasta muy de
madrugada leyendo en la biblioteca que prefería no llevarle las llaves tan
altas horas de la noche para no molestarla.
En dichas tardes y
noches en dicha bibliotequita fue donde nació mi pasión por los libros, la
lectura y las bibliotecas. Luego ya como el único lector asiduo de toda la
ciudad y habiendo aprendido de doña Josefina los servicios básicos de consulta
o referencia, pues ella a veces tardes enteras se iba por completo y me dejaba
al cargo de la biblioteca ya en funciones como todo un bibliotecario, aunque
voluntario. Así, a muchos de mis condiscípulos y público en general los
invitaba a la biblioteca y los atendía. En esos años alrededor de la biblioteca
existía mucha prostitución, y a este sector de la población los atendía muy
especialmente y sin ninguna discriminación, doña Josefina también les atendía
sin discriminación. Aunque en general debido a dicha situación de problemáticas
sociales, además de la prostitución y muchas cantinas alrededor de la
biblioteca no hacían a la biblioteca muy atractiva para la población, además de
altísimos niveles de analfabetismo en la ciudad, el estado de Chihuahua y en
todo el país, salvo como en mi caso a los estudiantes desde primaria a
preparatoria pues no había en esos años universidades.
Así, debido a esas
gratas experiencias como lector y bibliotecario voluntario en esa grandísima
pequeñita biblioteca fue como nació mi pasión por servir a la humanidad a
través de las bibliotecas (aunque también en los mismos años fui voluntario de
auxiliar de paramédico de la Cruz Roja de Ciudad Camargo… siempre me ha gustado
ser voluntario de las grandes causas a favor del bienestar de la humanidad).
Ahí es donde dije que si algún día eligiera alguna profesión me gustaría ser
bibliotecario.
Aunque desde 1984
hasta 1995 cuando empecé a estudiar formalmente la Licenciatura en
Bibliotecología de la Facultad de Filosofía y Letras en la Universidad Autónoma
de Nuevo León (FFyL, UANL) en San Nicolás de los Garza, Nuevo León, México
hubieron de pasar muchas vicisitudes desde aquel sueño preparatoriano. En 1989
ingresé a la Licenciatura en Historia en FFyL, UANL básicamente por el
materialismo histórico de Marx y para entonces mi pequeña bibliotequita
personal ya tenía algunos miles de ejemplares. Por lo que decidí visitar ahora
asiduamente dicha biblioteca de dicha facultad, ahora con la finalidad
autodidacta de aprender catalogación con las normas anglo americanas y
clasificación en Dewey y así por algunos años autodidácticamente aprendí
catalogación AA y clasificación Dewey y también gracias a Tony un buen
bibliotecario de ahí, y por mí mismo y con tarjetas de cartón yo catalogué y
clasifiqué mi primera biblioteca de 3, 000 volúmenes con todo y etiquetas de
signaturas topográficas. Debido a la represión burguesa del Partido
Revolucionario Institucional (PRI) que era el partido burgués único del Estado
(desde 1929 hasta 2000 y regresó de nuevo de 2012 hasta el 2018) fui suspendido
por un año y medio. Para 1993 reingresé a la facultad (FFyL, UANL) ahora a la
Licenciatura en Lingüística Aplicada, y en un año la represión burguesa volvió
a reprimirme y quedé ahora un año y medio suspendido. En esos tiempos de
represión burguesa tan álgida ya no pensaba seguir estudiando pues los
activistas críticos del sistema ya temíamos hasta por nuestras vidas. Pero en
ese tiempo una estudiante de bibliotecología vio mi colección de libros y me
recriminó que por qué me robaba libros de la biblioteca, pero al saber que eran
míos y que sin haber estudiado la carrera los había clasificado y catalogado
bien (bueno en realidad como hoy todos lo hacen de la Library of Congress, yo
me copié la mayoría de la biblioteca de FFyL-UANL), ella me recomendó que
estudiara ya directamente la licenciatura en bibliotecología pues que con esa
demostración ya sabía mucho y que si tenía madera de bibliotecario. Para 1995
reingreso por tercera vez a FFyL, UANL, pero ahora a la Licenciatura de
Bibliotecología, que era la que tenía menos alumnos y que no era considerada
una carrera muy crítica o anti-sistema o anti-capitalista. Y dado que en 1994
la represión burguesa del PRI-Estado tuvo verdaderos combatientes socialistas
armados como el Ejercito Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) que irrumpió
en la escena nacional con impacto mundial, pues creo que lo que hiciéramos los
activistas teóricos era una caricatura con el EZLN. También de 1994 a 2000 el
último gobernante del estado fascista del PRI-Estado de 1929-2000 fue más
conciliador y no tan represivo como los anteriores, por lo que todo fue mejor
para todos los críticos del sistema fascista del PRI-Estado de México. Aún con
todo desde 1995 tracé el plan para estudiar la maestría en bibliotecología en
el extranjero dado que ahora el gobierno persiguiendo a los neo-zapatistas del
EZLN ya cualquier crítico era del EZLN y merecía represión, y pues ya vivir en
México en estas circunstancias de álgida represión burguesa era muy peligroso
para los críticos. Cosa que logré de 2000 a 2001 en la Universidad Estatal de
Nueva York en Buffalo, Nueva York, EE.UU. después de haberme titulado por fin y
por primera vez en junio de 1998 de Licenciado en Bibliotecología por la FFyL
de la UANL (habiendo estudiado desde 1989 hasta 1998).
Y básicamente esta
pequeña historia de pasión preparatoriana por servir a toda la humanidad con
servicios bibliotecarios incluyendo a los grupos más discriminados como las
prostitutas, influenciada por las más humildes y nobles de las ideologías como
las socialistas por servir socializadamente a todos cuantos lo necesiten. Que
desde 1984 que empezaron dichos sueños bibliotecarios de preparatoria hasta
2010 cuando me titulé con el Doctorado en Estudios de la Información por la
Universidad de Sheffield, Inglaterra y hasta hoy día (10 abril 2016), han sido
32 largos años de lucha crítica, teórica, ideológica y activista contra el
capitalismo (el sistema cuya única ideología es concentrar el 99% de la riqueza
material social en forma privada en manos del menos del 1% de la población
mundial holgazana quienes mediante el usufructo de ganancias ilícitas del 99%
del resto de la humanidad a quienes dicho 1%
explota, oprime y esclaviza mediante coerción de leyes burguesas o
violencia irracional de todas sus formas reales o surreales y quienes sólo
sobreviven famélicamente y a punto de inanición con mendrugos del 1% del total
de la riqueza material global) en general y en el ámbito bibliotecario en
particular en donde al igual que Frankl sobrevivió a los campos de los otros
nazis, los alemanes, en Aushwitz un
servidor es también un sobreviviente del fascista PRI-Estado de los Estados
Unidos Mexicanos y que nunca ha dejado de luchar pacíficamente contra la gran
lacra de la humanidad trabajadora que es el capitalismo, ni en general ni en el
campo bibliotecario, el capitalismo cognitivo e informacional.
¿Cómo definiría a un
bibliotecario?
Recuerdo mucho las
frases de uno de mis mejores maestros bibliotecológicos, el Mtro. Vicente Sáenz
Cirlos, una en particular parafraseando al bibliotecario estadounidense Louis
Shores, que el bibliotecario es como un puente entre los lectores y el mundo de
la información. Y más o menos así con esas buenas comparaciones del puente, se
podría definir así a un bibliotecario, como un ser humano cuya profesión u
oficio es socializar toda la información documental pasada, presente y futura a
través de un acopio, y organización sistemática, racional, permanente, y científica, para ofrecerla o diseminarla o
compartirla empática, disciplinada, oportuna y pertinentemente al uso o lectura
de toda la población que la requiera sin ningún distingo ni discriminación de
ningún tipo a través de un acceso gratuito, procomunal, democrático, e
irrestricto mediante todos los sistemas, medios, formatos o materiales
encriptorios presentes o futuros, y luchando hoy y siempre contra todas las
leyes y absurdos burgueses capitalistas que desde los orígenes del sistema
capitalista de producción como tal que desde el siglo XVI hasta nuestros días
(e.g. leyes de derechos de copia de autores o copyrights, o patentes, o
propiedad intelectual, etc.) tienen la única función de privatizar toda la
información documental y sólo hacerla accesible a quienes tengan dinero para
comprarla como cualquier mercancía en el mercado y no como derecho humano al
que los humanos al nacer tienen derecho a recibir gratuitamente.
Zapopán, siguiendo
algunas expresiones vertidas en anteriores reportajes, alguna vez has comentado
que la sociedad del conocimiento es solamente una falacia inventada por las
clases dominantes para poder comercializarlo todo ¿que rol social debería cumplir
la biblioteca en dicho escenario?
Sí, te refieres aquí
a mi artículo “Introducción al pensamiento crítico y escéptico en las ciencias
de la información documental” [véase abajo en la sección de referencias a:
Muela Meza, 2008].
Como menciono ahí y
como lo he mencionado antes y como lo seguiré mencionando después, todo mi
análisis y crítica se centra en una crítica desde las amplias sombrillas
ideológicas del socialismo o el marxismo o la izquierda mundial
anti-capitalista, donde al margen de las diferencias de matices que tengan
éstas, lo que tenemos en común es que el capitalismo y su clase dominante la
burguesía son los culpables de la explotación y opresión del 99% de la
humanidad trabajadora y de la acelerada destrucción de nuestro planeta.
Y sí, como lo he
mencionado antes (Muela-Meza, 2008), las sociedades de la información y/o el
conocimiento son falacias ideológicas creadas por los ideólogos burgueses del
capitalismo. No quiero repetir lo que ahí ampliamente analizo, pero toda
falacia contiene engaños en la argumentación lógica que se pretende hacer pasar
como válida, pero como sabemos, precisamente es argumentación inválida,
ilógica. Luego, las ideologías de los burgueses todas son falaces, pues ante la
irracionalidad de querer hacerle creer a todos los humanos pensantes de la
humanidad (digo hay recién nacidos, infantes, niños… ancianos… y mucho demente
y trastornado mental) que el capitalismo es necesario para el progreso de la
humanidad y que la clase dominantes de zánganos de los burgueses capitalistas
ya descriptos arriba que son necesarios para explotar, oprimir al 99% de la
población trabajadora y ellos expoliar y disfrutar hasta el derroche irracional
el 99% de la riqueza material global generada por el 99% de la fuerza laboral
global mientras esta última sólo accede –y eso a base de toda una vida de lucha
y sacrificios atroces y precarios y las de todos sus miembros de sus progenies
por infinitas generaciones de sus estirpes y linajes– escasa y precariamente a
un 1% de toda la riqueza material global cuando ellos generaron, generan y
seguirán generando el 100% de dicha riqueza pasada, presente o futura, pues
simple y sencillamente pueden justificar este estadio de salvajismo y barbarie
inherente al capitalismo en base a falacias ideológicas. Esto es, siempre
intentan imponer su sistema de explotación y opresión inaudito, cuando es vía
argumentación, con mentiras, falacias, y engaños ideológicos. Y cuando una
ínfima minoría (pues requieren tener a una humanidad sometida y estúpida
desprovista de alfabetización e información documental) sabe leer y escribir y
entiende la rapacidad del capitalismo pues recurren siempre a la violencia para
callarlos.
Así, si te fijas
arriba en la definición que configuro arriba de bibliotecario, el eje central
de mi crítica socialista es que la información documental universal pasada,
presente y futura debe ser vista como un derecho humano y no como una
mercancía. En ese sentido, las bibliotecas y otras instituciones de información
documental deben también ser vistas, concebidas, construidas, aún en los países
capitalistas más altamente industrializados como instituciones que sirven a la
humanidad a satisfacer sus necesidades de información documental en tanto
derechos humanos.
Así, al capitalismo
no le importan los derechos humanos, y como producir-vender-comprar no es un
derecho sino mercancías, y cuando la amplia mayoría de los trabajadores del
planeta viven precarizados y en condiciones hondamente miserables a causa de la
explotación y opresión de los burgueses del capitalismo, comprar información
documental es un lujo.
Entonces los
burgueses crearon las universidades, todo tipo de escuelas y las bibliotecas,
no como un regalo de buenos samaritanos para los trabajadores, sino como
instrumentos de instrucción con ideología burguesa y capitalista para el manejo
de las máquinas y administración capitalista de las fábricas y empresas de todo
tipo. Y para costear las universidades, escuelas y bibliotecas los burgueses
eligieron a otros burgueses de sus mismas clases dominantes mediante sus
partidos burgueses para ocupar todos los Estados burgueses del planeta, y como
empresarios o industriales burgueses, y diputados o senadores, o gobernantes a
todos los niveles y a nivel de jefes de Estado, son también burgueses, entonces
estos crearon leyes en donde todos los trabajadores del mundo deben pagarle a
los amos de los Estados burgueses las cuotas por concepto de impuestos por todo
tipo de servicio público social en donde se incluyen las universidades,
escuelas o bibliotecas (sean privadas o públicas), pero dichos impuestos sobre
la renta para las clases trabajadoras precarias y paupérrimas son más altos que
los que pagan los burgueses o en muchos Estados los burgueses no pagan y en
muchos casos se burlan del fisco usufructuándolos en paraísos fiscales
off-shore fuera de sus países para evadir dicho pago.
De tal suerte que las
clases trabajadoras super explotadas y oprimidas son las que además de generar
exorbitantes ganancias de plusvalía a los burgueses de las empresas donde los
explotan y oprimen y en donde a diario producen el 100% de la riqueza material
global del planeta y los burgueses sólo les pagan 1% de la misma y además ser
sueldos miserables, de ahí mismo los burgueses en el poder del Estado les
exigen el pago de impuestos sobre la renta para mantener todas las
instituciones del sector público, incluidas universidades, escuelas y
bibliotecas.
Pero así como la
inmensa mayoría de las clases trabajadoras del planeta no disfruta totalmente
la riqueza material global que produce en sus centros burgueses de explotación
y opresión, de la misma forma, tampoco disfrutan las bondades del acceso a la
educación formal, a la escuela primaria, ni secundaria, ni preparatoria, y ni
mucho menos a la universitaria. Y dado que no saben leer ni escribir y cuando
lo hacen, debido a los nuevos horarios de la precarización y flexibilización
laboral burguesa donde deben ahora trabajar a tres turnos rotativos, con
jornadas más amplias que las 40 horas semanales y con mayor intensificación, pues
simplemente les es imposible asistir a leer a las bibliotecas, y mucho menos a
leer por placer.
Decía Sagan (1997),
el mantener analfabetas a las amplias mayorías de la población es una bomba de
tiempo que más pronto que tarde nos va a explotar en la cara como humanidad,
que el analfabetismo es el eje de todos nuestros más grandes males sociales.
Así, por todo lo
antes expuesto en mis trabajos previos y aquí, es de las más absurdas de las
falacias de clases dominantes burgueses del capitalismo actual el que osen
siquiera esgrimir la posibilidad de que existe una sociedad de la información o
una sociedad del conocimiento, cuando precisamente las amplias mayorías
trabajadoras de la sociedad son analfabetas y no tienen acceso a la información
documental en bibliotecas. Y dada la tendencia demencial inherente del
capitalismo de capitalizarlo y privatizarlo todo, los burgueses ahora quieren
también capitalizar y privatizar todas las universidades, escuelas y
bibliotecas otrora públicas. Pero dado que incluso las instituciones privadas
que dan servicios públicos son financiadas por el erario público administrado
por los amos de los Estados burgueses en el poder, y dado que son los
trabajadores los que más pagan impuestos y los que además a pesar de ganar
abismalmente menos que las ganancias de los burgueses son los que pagan las
tasas más altas, entonces sólo vemos y veremos, de seguir estas tendencias
fascistas de las clases burguesas actuales de crear un capitalismo más
totalitario estilo de la Alemania nazi, con precarización aún más extremas de
las clases trabajadoras… y por lo tanto mayor charlatanería burguesa y mayor
idiotización y alienación contra los trabajadores, que lo mismo por su misma
ignorancia, no sabrán si optar por los socialistas o por los fascistas actuales
será la mejor opción para liberarse de sus cadenas burguesas que le explotan y
oprimen.
Considerando según
algunas fuentes que el 90% de la humanidad no tiene acceso a necesidades
básicas (agua, luz, cloacas) ¿cómo se discute el concepto de ética dentro de
las denominadas sociedades de información?
Se entiende la ética
como el estudio del comportamiento correcto de los humanos en tanto individuos.
Así, desde mi perspectiva la ética se da en el dominio público, en el dominio
de los derechos humanos de los ciudadanos, en la ciudadanía, en tanto
individuos y su comportamiento individual ante el público. Por lo tanto las
empresas e industrias burguesas capitalistas, cuyos intereses es el beneficio
privado de sus accionistas y cuyo único
fin es obtener ganancias lícitas o ilícitas (véase los empresarios del
narcotráfico de drogas que las venden y muy caras), no tienen ética.
Entonces, más que las
falaces sociedades de la información o conocimiento, deberíamos explicitar que
se trata de nuevas ideologías falaces para que las clases dominantes
capitalistas burguesas justifiquen sus nuevas formas para capitalizar y
privatizar la información documental, o más bien dicho, la creación de nuevas
industrias con capitalización intensiva de información o conocimiento, que como
menciono no hay nada de ético en ello.
En todo caso,
habiendo ya explicado arriba los absurdos irracionales de la burguesía de
querer engañarnos con sus falacias de las sociedades de la información o el
conocimiento, y habiendo recordado que son las inmensas mayorías de las clases
trabajadoras las que por un lado crean el 99% de la riqueza material global vía
su fuerza humana de trabajo explotada, oprimida y usufructuada en sus centros
de explotación capitalistas, sean manuales, o intelectuales (e.gr.
informacionales o cognitivos), y que además ellos financian la mayor carga de
pagos con sus impuestos todas las instituciones del sector público como las
universidades, escuelas y bibliotecas, entonces más bien el debate ético debe
girar en torno a los bibliotecarios que a sabiendas de esos hechos palmarios y
en lugar de solidarizarse con los de su clase trabajadora, toman partido por
los burgueses convirtiéndose, en lugar de bibliotecarios, como lo he
conceptualizado arriba, en biblio-policías cancerberos al servicio del
capitalismo informacional y cognitivo favoreciendo plusvalías, usufructos y
ganancias extras de los capitalistas vía sus leyes de propiedad intelectual
como el copyright a través de las bibliotecas [véanse Muela-Meza, 2006; 2009].
Has sido fundador de
la Revista Crítica Bibliotecológica, que desde 2008 viene publicando
artículos centrados en la
bibliotecología y las ciencias de la información ¿Qué balance puedes hacer de
las contribuciones académicas de los colegas involucrados?
Mira, el impacto que
ha tenido la revista es más bien cualitativo que cuantitativo. El balance de
las contribuciones académicas de los colegas involucrados es muy positivo
considerando que ostensiblemente es una revista de bibliotecología crítica en el
sentido anti-capitalista. Y pues como sabes analizar y criticar el lado salvaje
y barbárico del capitalismo en general y en particular en las ciencias de la
información documental, así como proponer su erradicación y alternativas
socializadoras viables es más difícil que montarse en el carro felicista de los
cancerberos del establishment como la gente de IFLA o de la inmensa mayoría de
asociaciones nacionales de bibliotecarios o archiveros o documentalistas o de
todos los profesionales de la información documental. Máxime que la burguesía
ha creado sus propias leyes para explotar y oprimir a los trabajadores de la
educación, en este caso los profesores, quienes so pena de recibir migajas
extras, adicionales y contabilizadas fuera de sus nóminas oficiales cada año,
pues deben someter a las mafias informacionales de la burguesía tales como que
sólo publiquen en revistas de factor de impacto como las indizadas en la mafia
burguesa mundial quienes son amos de la industria de la información y el
conocimiento como las de ISI de Thomson Reuters, o Scopus de Elsevier o las de
Bertelsmann, o Springer Verlag, o Time Warner o Ebsco, por mencionar sólo las
más importantes, que además de ser accionistas de las industrias de la
fabricación de armas para asesinar inocentes como el caso de Elsevier, las 5
primeras juntas usufructúan el 95% de la ganancia mundial de dicha industria
(cfr. Schiller, 1996).
De momento llevo 8
años publicándola ininterrumpidamente. Estoy esperando llegar a los 10 para
hacer un balance más bibliométrico, bibliométricamente crítico claro está.
Pero en esta parte
cualitativa de logros te puedo mencionar algunos.
En principio la
revista surgió como un grito de guerra por varios colegas críticos del sistema
capitalista que por doquier eran censurados, incluido a un servidor. Dos casos
notorios de censura se dieron con el bibliotecario mexicano Saúl Armendáriz
quien era dirigente de la Asociación Mexicana de Bibliotecarios, A.C. (AMBAC) y
quien en junio de 2004 me iba a publicar un artículo en su revista Líber:
Revista de Bibliotecología de dicha AMBAC. Pero por motivos ajenos a la razón
humana me censuró siendo que el artículo era de lo más “inocuo” o
“políticamente correcto” en la jerga de estos burgueses. Finalmente en 2006 me
lo publicaron en Perú (cfr. Muela-Meza, 2006b).
Otro caso de censura
fue el caso del Director de la revista bibliotecológica de la Universidad de
Lasalle de Bogotá, Colombia cuyos nombres no recuerdo. El artículo censurado
fue éste: Muela-Meza (2008), mismo que fue el primero que publiqué en mi
revista después del arbitraje de otros bibliotecólogos expertos. Y en el caso
de esta censura como todas fue por demás absurda. Primero me dijo que sí me
publicaría el artículo y luego que siempre no que porque los árbitros le
dijeron que estaba muy largo.
Por otro lado, el
comité editorial de mi revista, más que un comité de extraños es una red de
intelectuales comprometidos con la bibliotecología crítica a los cuales en su
mayoría conozco o bien personalmente o bien virtualmente porque me han citado o
porque compartimos ideas socialistas o izquierdistas anti-capitalistas afines.
Al principio arranqué con pocos árbitros. Muchos con los que arranqué como tus
coterráneos Tatiana Carsen y Verónica Saquilán nunca los había conocido en
persona. Los invité ante mis participaciones por ejemplo en 2004 en mi
participación virtual en el Primer Encuentro Latinoamericano de Bibliotecas,
Información y Documentación organizado por el GESBI de Argentina y el CEBI de
México. Luego al paso de los años fui agregando más. Por ejemplo a Fernando
Montenegro y Carlos Repetto los invité y aceptaron ser árbitros porque citaron
varios de mis artículos publicados ya en los primeros números de la revista. A
muchos otros los invité y aceptaron porque por años han estado publicando en mi
revista como Felipe Meneses del CEBI y profesor de bibliotecología de la UNAM,
Mexico; Pedro López López profesor bibliotecológico de la Universidad
Complutense de Madrid y María Engracia Martín bibliotecaria de España; la
profesora bibliotecológica Priti Jain de Botswana y algunos otros por el mismo
motivo. Tu puedes ver el comité editorial (véase: https://sites.google.com/site/criticabibliotecologica/comiteeditorial ) y verás que muchos son profesores de
bibliotecología en universidades en sus países de origen, muchos incluyen ser
árbitros de la revista con orgullo en sus CVs, por lo que se podría inferir que
sí usan los artículos aquí publicados como parte de sus clases con sus alumnos,
pero bueno, te digo habría que hacer varios estudios del impacto real.
Pero te digo, está
pendiente realizar realizar estudios, ya lo iré planeando a los 10 años en el
2018.
Por lo pronto, te
digo, cualitativamente va muy bien. Por otro lado, en este 2016 le cambiaré el
nombre para poder sacar el ISSN que por 8 años me ha censurado el establishment
burgués por motivos ajenos a la razón de los humanos pensantes. También espero
indizarla en DOAJ (en donde junto a E-LIS soy Editor Asociado para journals
hispanoparlantes), que como te digo, por falta de ISSN y otros detalles no he
podido ni siquiera intentar someterla a
dictaminación. Por otro lado, como este es el proyecto de una sola persona, un
servidor, y como es totalmente gratuita
en todos los procesos, pues por un lado que toda la edición recae sólo en mí y
que por otro lado no soy muy savvy techy digamos en software de OJS para
ponerla en línea como esos nuevos empresarios que ahora usufructúan y son los
nuevos bucaneros del procomún informacional ahora en el open access, y sobre
todo que su finalidad es más como resistencia anti-capitalista, pues me la he
llevado y nos la hemos llevado tranquila. Pero de que sobran ideas e iniciativas,
pues sobran, pero mientras no haya voluntarios que además sean afines
ideológicamente pues está mucho en juego para ponerlo en manos de los burgueses
incluidos los nuevos ladrones del open access. Pero te digo, esto es de
principios socialistas y resistencia y perseverancia y eso es lo que me sobra y
que los burgueses no entienden que no están en venta.
Considerando el
complejo escenario de la denominada Sociedad de la Información y lo que supone
desde dicho contexto liberar información sensible del Estado ¿que piensa de los
procesamientos judiciales que se aplicaron a ciudadanos como Julian Assange
(vía Bradley Manning) o Edward Snowden, por citar solo dos casos que más
impactaron en los últimos años?
No. Como te digo. No
hay nada complejo en esta nueva ideología burguesa, es business as usual como
dicen en inglés. A Cuba de la revolución de Fidel siempre le echaban en cara
que tenía muchos años como dictador comunista de Cuba. En la guerra fría la
burguesía mundial siempre le achacó al bando del llamado socialismo real que
duró de 2017 a 1989 con la caída del muro de Berlín como dictaduras de Stalin y
otros líderes. Pero nunca nadie dice que el planeta salvo esos escasos 70 años
de experimento socialista anti-capitalista en algunos pocos países, en la
mayoría del planeta hemos padecido la dictadura del sistema por más de 5 siglos
como formación económica-social y modo de producción predominante sin mencionar
que hay visos de propiedad privada desde antes de los homínidos.
Así, ante la caída
del muro de Berlín la burguesía mundial se ha estado haciendo totalitaria al
estilo fascista y de los nazis del siglo XX. Para que el capitalismo funcione
su clase dominante burguesa debe tener esclavizada a la clase trabajadora, a
los mercados fluidos aunque nadie compre nada y sólo los trabajadores salven de
la quiebra a las empresas vía rescates del gobierno (mantenidos en un 99% por
los impuestos de los trabajadores). Para todo ello se requieren controles
fascistas (no en balde mientras respondo esto un líder tipo Hitler llamado
Donald Trump muestra el mismo tipo de agresividad política parecida a Hitler y
sus nazis). Entonces, descartada la competencia política desde 1989 la
burguesía mundial ha recurrido al fascismo rampante edulcorándolo como siempre
con ideologías falaces como las de las sociedades de la información y el
conocimiento o estratagemas retóricas de charlatanes como “la guerra contra las
drogas,” “guerra contra el terrorismo,” etc. Etc. Y así, crean, inventan infinitas ideologías, falacias, engaños,
estratagemas retóricas y utilizan al máximo todos los recursos tecnológicos
para vigilar, controlar (incluso hasta modificar humanos genéticamente),
persuadir, modificar comportamientos, etc etc de las mayorías.
Y como ya no hay
enemigos “comunistas” contra quien bombardear, entonces, ahora la guerra es
doméstica, y pues las pocas resistencias son también domésticas como el caso de
Assange, Manning y Snowden, y muchos otros en muchísimos otros frentes, claro
está. Esto para el capitalismo te digo es business as usual. De lo que se trata
es de crear conciencia y crear más focos de resistencia en todos los frentes
contra este nuevo fantasma del fascismo totalitario del siglo XX que se está
cerniendo sobre el planeta en este siglo XXI. Ya hemos visto de lo que es capaz
el capitalismo en más de 5 siglos, máxime con los holocaustos de Armenia por
los Turcos otomanos en 1915 y sobre todo el de los nazis de la Alemania de
Hitler de 1939 a 1945 contra los judíos, comunistas, negros, gitanos, enfermos,
débiles, etc. Sin dejar de mencionar todas sus guerras genocidas en estos más
de 5 siglos por su demencial ideología de que una ínfima minoría esclavice a
todos los humanos, los controle como robots y los explote y oprima como simples
máquinas de generar plusvalor y riqueza de disfrute exclusivo para dicha
minoría.
No, hoy se requieren
muchos Assanges, Mannings, y Snowdens para regresarle a la humanidad un nuevo
socialismo que aprenda de los errores
de aquellos 70 años y saque el lado más amoroso, amistoso, socializador,
cooperador, armonioso y solidario entre los humanos y en equilibrio armónico
con las demás especies en éste y los demás planetas, en éste y los demás
universos donde habitamos o habitaremos si recomponemos el rumbo de la
hecatombe capitalista por un renacer socialista democrático.
Como diría Sagan
(1998) en “El enemigo común” donde criticaba tanto a los EE.UU. como a la ex
URSS: compitamos por ver quién erradica primero toda el hambre, las
enfermedades, la contaminación y todas las cosas malas del planeta en lugar de
ver quien lo aniquila primero.
¿Cómo profesional de
la información, cuáles lecturas lo influenciaron?
Claro que entre
muchas obras filosóficas, científicas y hasta literarias, entre las que más
destacan, además de la obra de Marx, Engels y Lenin, me ha influido sobremanera
la obra socialista de Carl Sagan, Albert Einstein, Samir Amin, Edgar Morin y
Noam Chomsky, la obra de la complejidad de Stephen Hawking, y recientemente el
debate crítico, izquierdista y socialista en las epistemologías científicas
propuesto por Sokal (2006) y Sokal y Bricmont (1999).
Al menos en
Argentina, es muy curioso lo que genera entre los bibliotecarios la mención de
temas políticos en las listas profesionales, si bien son habituales las
discusiones en algunos casos se manifiesta un evidente hartazgo bajo la excusa
de que los temas solo deberían ser bibliotecológicos ¿en México se percibe lo
mismo? ¿Por qué considera que en ciertos colegas causa tanto rechazo la
participación política de los bibliotecarios en foros y listas?
Los bibliotecarios
que rehúyen el debate político es porque así mismos se consideran
biblio-policías cancerberos de sus amos burgueses capitalistas, ellos no
aspiran a ser como Gandhi sino más millonarios que Bill Gates o el mexicano
Carlos Slim. Ellos así mismos se ven como pequeño burgueses de la clase media,
no se ven como trabajadores de dicha clase. Sus únicas aspiraciones es ser
serviles ante el establishment para recibir mejores tajadas de ganancias que
los demás trabajadores de su categoría o rango, no les importa vender a sus
mejores amigos con tal de ellos escalar más y obtener mejores migajas. Y como
ya las ideologías burguesas las tienen inyectadas en su hemoglobina ya se
comportan como los burgueses que cuando alguien le reclama a algún diputado o
gobernador o senador o alcalde cualquier servicio o mejora o critica de algo
siempre lloran: “es que ya están politizando tal o cual tema.” Al expresar eso
están denostando la política, cuando es en verdad una respuesta política pero
burguesa pero para aplastar toda crítica anti-capitalista. Por eso
parafraseando a Sartré, cuando alguien dice que no se hable de política es
porque ya tomó partido por los poderosos burgueses en contra de los
socialistas.
El plan de estudios
bibliotecarios que se aplica en México ¿favorece la adquisición de
conocimientos vinculados a la bibliotecología social y política?
No. Y me atrevería a
decir que ningún plan del planeta aborda explícitamente estos debates. Pues la
bibliotecología al ser apéndice de la administración o la economía se la ve mas
como cualesquiera otras disciplinas así de instrumentales como la
administración o así de pro-capitalistas como la economía. Es una lastima pero
esa esa la realidad. Aquí es donde radica esa necesidad de crear conciencia y
crear muchos focos de resistencia anti-capitalistas en este caso anti
bibliotecología apabullantemente burguesa y capitalista.
¿Que opinión le
merece la llamada neutralidad bibliotecaria?
No hay tal
neutralidad. Todo mundo toma un partido. Y por desgracia el capitalismo se ha
encargado de inculcarle muy bien sus ideologías y la mayoría de los
bibliotecarios están a favor del capitalismo y la privatización de la
información.
Se habla
frecuentemente de la lenta desaparición del libro, incluso en foros de
bibliotecología ¿Qué le provoca esta situación?
No. El libro nunca
desaparecerá ni la información ni el conocimiento. Sólo cambian los materiales
encriptorios, los medios de almacenamiento y diseminación, pero los conceptos
no cambian.
Nombre una anécdota
que lo haya sorprendido en una biblioteca.
Ver unos ciegos
leyendo en braille en una biblioteca pública donde yo era director y haciendo
manualidades artísticas estando totalmente ciegos. Es fascinante la gran luz
que puede emitir una biblioteca socializadora e incluyente de todos, sobre todo
de los desposeídos y excluidos del mundo.
Un verdadero gusto
compartir esta entrevista Zapopán.
Sokal, A.
(2009). Más Allá de las Imposturas Intelectuales: Ciencia, Filosofía y Cultura.
Barcelona: Paidós (Col. Transiciones No. 78).
: la entrevista fue publicada en Fuentes: Revista de la Biblioteca y Archivo Histórico de la Asamblea Legislativa Plurinacional (La Paz, Bolivia), Vol. 10, No. 45, pp. 85-93, ISSN: 2225-3769